07/02 - Nunca irrelevante a los ojos de Dios
- Carlos Brenes
- 7 feb
- 2 Min. de lectura
… el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero el Señor mira el corazón (v. 7).
La escritura de hoy :
1 Samuel 16:1, 6-13
Cada año, los equipos de fútbol profesional eligen a jugadores nuevos. Los entrenadores pasan miles de horas evaluando el talento y el estado físico de los candidatos. En 2022, Brock Purdy fue el último de los seleccionados, y etiquetado «Sr. Irrelevante», sobrenombre que se da al que ocupa ese lugar. Nadie esperaba que jugara ningún partido esa temporada, pero pocos meses después, Purdy llevó a su equipo a ganar dos finales. Sin duda, los gerentes de ese equipo no hacen un buen trabajo en identificar potenciales. Y nosotros tampoco.
En una conocida historia del Antiguo Testamento, Dios envió al profeta Samuel a escoger entre los hijos de Isaí al próximo rey de Israel. Cuando Samuel se dejó guiar por el aspecto físico, Dios le dijo: «No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura» (1 Samuel 16:7), y lo guio para que no eligiera al mayor o el más alto, sino al menor y aparentemente más irrelevante: David, que sería el rey terrenal más grandioso de Israel.
¿Por qué solemos evaluar tan mal a las personas? Nuestro pasaje nos recuerda que «el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero el Señor mira el corazón» (v. 7). Cuando tengamos que elegir a alguien, pidamos a Dios que nos dé sabiduría para hacerlo según las cualidades que Él valora.
De: Lisa M. Samra
Reflexiona y ora
¿Cuándo te sentiste «irrelevante»? ¿Cómo podrías ver a las personas desde la perspectiva de Dios?
Padre, dame discernimiento para ver a los demás como tú los ves.



